Las sacerdotisas eran las encargadas de ofrecer sacrificios a las deidades para cuidar sus templos. Y como tenemos que cuidar el templo en el que vivimos actualmente, nuestro mundo, estas nuevas sanadoras son las que, de una forma más natural y mística nos van a servir de amuleto energético para ofrecernos fuerza, protegernos y cuidarnos en la situación en la que nos encontramos.
Oriente, Méjico, África o el Norte de Europa como puntos cardinales para estas diosas vanguardistas que a través de construcciones capilares imaginativas, desbordantes, exageradas y originales, representan la luz al final del túnel. Luz que identificamos por tonos amarillos, que dan esperanza y claridad, combinados con el poder del lila, que da solidez, fortaleza y resistencia.
La sabiduría siempre ha acompañado a estas mujeres. Cualidad que tenemos que valorar ahora más que nunca.
Peluquería: Carlos Buendía.
Make Up: Isabel Sánchez
Fotos: J. Carlos G. Arteseros
Estilismo: Carlos Buendía.
Comunicación: Óscar Martínez.