Sobre las pasarelas, las grandes casas de la moda reescriben el lujo y muestran su lado más creativo, reinventando sus patronajes más icónicos, mezclándolos con colores imposibles o combinando tejidos exquisitos con otros más mundanos. Culminan sus propuestas de imagen con el cabello, lanzando propuestas que luego serán tendencia.
Dior, recogidos y mitología
Los recogidos muestran su potencial más artesanal hasta hacer del cabello un símbolo de exquisitez. “Los recogidos trenzados, perfectos y pulcros ponen de manifiesto que la tendencia son peinados trabajados y que requieren de destreza por parte del peluquero. De hecho, reivindican nuestro trabajo, nuestra experiencia y dominio técnico para conseguir una imagen impecable y maravillosa”, explica María José Márquez, formadora de peluquería femenina en Antonio Eloy Escuela Profesional.
Valentino, mucho más que la vie en rose
La colección firmada por el italiano Pier Paolo Piccioli cubrió la pasarela de un tono rosa que era toda una reivindicación. Sin embargo, el cabello supo reivindicar su importancia con su presencia. “El pixie con flequillo desfilado, pero las melenas peinadas hacia atrás con efecto húmedo, también, fueron algunas de las propuestas más interesantes de la firma para su colección Pink PP Collection. Se complementaban a la perfección con un color magenta apabullante sin dejar de ser protagonistas”, indica M.ª José Llata de Peluquería Llata Carrera.
Prada, el futuro es retro
Distinguirse en el recuerdo es lo que buscan las colecciones y los looks de la casa lo consiguieron. “El desfile de Prada avanzó el color de pelo de la temporada, un ginger oxidado, y puso de manifiesto que el volumen y los looks retro actualizados son súper tendencia. Lanzaron el cabello a una nueva potencia con un recogido creativo, minimalista e impecablemente ejecutado”, asegura Christian Ríos de Christian Ríos Hair Couture.